La bodega de Casas Ibáñez (Albacete) se consolida como referente enoturístico en la DO Manchuela tras obtener el prestigioso premio de los Best in Class.
Un premio avalado por los enoturistas
Los premios Best in Class Wine Awards que otorga la guía Wine Up! se celebran anualmente y en esta edición incluyeron seis categorías, destacando la dedicada al enoturismo. Vega Tolosa fue elegida mediante votación popular en la web de Wine Up, lo que refuerza su conexión con el público y su impacto real en el sector.
Pioneros del enoturismo en la DO Manchuela
Vega Tolosa fue la primera bodega de la Denominación de Origen Manchuela en ofrecer actividades de enoturismo. Desde hace más de 17 años, recibe más de 300 visitantes mensuales, quienes disfrutan de recorridos por el viñedo, catas comentadas y experiencias inmersivas en su sala de barricas.
“Este premio es una gran alegría para toda la familia. Hemos conseguido que Casas Ibáñez esté en el mapa del enoturismo”, afirmó Mariluz Tolosa, directora de enoturismo.
Experiencias únicas en bodega y viñedo
La bodega ofrece un amplio abanico de actividades, entre las que destaca su Cata Premium personalizada, que incluye la visita al viñedo centenario de Bobal y una cata exclusiva en barricas con vinos aún no comercializados, guiada por la propia Mariluz Tolosa.
Promoción del territorio y la gastronomía local
Además de sus propuestas vinícolas, Vega Tolosa impulsa la gastronomía local en colaboración con el restaurante Cañitas Maite y el estrellado Oba, dirigidos por los chefs Javier Sanz y Juan Sauquillo. Juntos diseñan menús especiales que maridan con los vinos de la bodega.
Un entorno privilegiado en el Valle del Cabriel
Los viñedos de Vega Tolosa se sitúan en un enclave natural singular, en la transición hacia el Valle del río Cabriel, y cuentan con variedades autóctonas como Bobal, Tardana y Albilla. Muy cerca se encuentra Alcalá del Júcar, uno de los pueblos más turísticos de la región.
Tradición familiar con visión de futuro
La familia Tolosa representa ya a la quinta generación vitivinícola, con la enóloga Rocío Tolosa trabajando junto a su padre Juan Miguel. La bodega posee más de 300 hectáreas de viñedo, muchas con cepas centenarias que reflejan la herencia y pasión por la tierra.